Bacalar, Quintana Roo, Mex. a 02 de abril de 2017.- Con el pretendido cambio del tesorero municipal, Juan Borges Chim y a la directora de Egresos, Claudia Balam Güemes la mitad del cuerpo de regidores del ayuntamiento de Bacalar demostraron su total ignorancia sobre los procedimientos para remover funcionarios bajo el argumento de falta de confianza en su desempeño.
El acto de intentar quitar a Juan Borges como tesorero municipal ocurrió en una sesión donde los regidores que exigieron el mencionado cambio ignoraban que para lograr dicho cambio debieron meter la solicitud expeditamente antes de aprobar el orden del día y no tratarlo en asuntos generales porque así lo establece Ley y el Reglamento Interno en su artículo 142, dicta que el Cabildo podrá remover a cualquier servidor de la administración dándole al presidente hasta 15 días para su desahogo, lo que los concejales en ciernes también incumplen.
Otro desatino de los regidores, provocado por su falta de preparación para ocupar el cargo, fue acudir al Congreso del Estado para solicitar una revisión a la cuenta pública de Bacalar, ignorando que desde hace más de un mes ya lo había hecho la propia XV Legislatura, por lo que el diputado Emiliano Ramos Hernández les tuvo que explicar con manzanas que todo informe lo emitirá en su momento la Auditoría Superior del Estado.
Los protagonismos mediáticos logrados, únicamente están evidenciando la ignorancia de la mayoría del cuerpo de regidores.
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